La aceptación, no implica conformarse

Con frecuencia la vida nos pone frente a distintas circunstancias, algunas de ellas nos pueden tocar fibras muy profundas, sobre todo cuando tenemos que aceptar que algo de nosotros no está bien, por ejemplo:
Con frecuencia la vida nos pone frente a distintas circunstancias, algunas de ellas nos pueden tocar fibras muy profundas, sobre todo cuando tenemos que aceptar que algo de nosotros no está bien, por ejemplo:
Hoy le insto a elogiarse, verse al espejo, y solo decirse gracias; gracias por estar conmigo, gracias por acompañarme, gracias por escucharme, y gracias porque me cuidas.
Sin agachar la cabeza, y solo dándole cabida al destello que contempla, siendo ese destello, usted.
Dra. Jennifer Gamboa
¿Cuántas veces a la semana veo el espejo de la casa y admiro el reflejo que me da?
Constantemente tenemos instaurado un chip con una vocecita silenciosa que nos está recordando todo aquello feo y malo que pensamos de nosotros. Parece entonces, que se nos enseña a desvalorizarnos y destruirnos desde nuestra infancia, en lugar de respetarnos y reconocer todo aquello de lo que somos capaces de lograr y de ser. Tomando como ejemplo lo que se nos dice socialmente a modo ley de vida, en donde “cada día hay que ser mejores personas”, tomándose como una imposición u orden.
Andamos por la vida deseando que suceda ese “algo” por lo que tanto hemos peleado y por lo que tanto la hemos luchado, como decimos popularmente, o por el contrario ese se nos presenta ese “algo” que nos trae tristeza y dolor. Pero resulta que cuando ese “algo” nos llega, parece que la vida y el tiempo juegan con nosotros congelado.
En la vida de muchísimas personas, cuando se trata de tomar decisiones, el tener una o varias historias tristes, nos lleva a pensar “tengo miedo de volver a pensar”, esto aplica para todo.
Toda persona tiene derecho a decir lo que piensan, expresar sus emociones, plantear sus ideas. La expresión construye libertad emocional, que nos permite ser auténticos, libres y además hacerle saber a los otros u otras, cómo somos y qué queremos.